Con
motivo del alarmante deterioro del patrimonio histórico del poblado de
Navalquejigo, y en especial de su iglesia, y ante la dejación de funciones del consistorio
de El Escorial y el riesgo de una operación urbanística especulativa, las
entidades abajo firmantes queremos manifestar lo siguiente:
La aldea de Navalquejigo fue fundada por repobladores segovianos y ya se
menciona en un privilegio otorgado por Sancho IV en 1287. Su monumento más
importante es la Iglesia de la Exaltación de la Santa Cruz, la más antigua de
las Iglesias Fortificadas de Repoblación de la zona, que tiene consideración de
Bien de Interés Patrimonial; aunque hay otros elementos de valor, como casas
herrén (S. XVIII), el corral de concejo (S. XVII), la picota y la fuente-lavadero
(S. XVIII), estando atravesado por dos vías pecuaria: la propia colada de
Navalquejigo y la que va desde este núcleo a la Cañada Real Segoviana. Además el
conjunto está clasificado como Yacimiento Arqueológico, y se incluye dentro del
Territorio Histórico de la Gran Cerca de Felipe II. En el nuevo proyecto del catálogo de El Escorial (2020), se otorga
Protección Integral al despoblado de manera general, a su iglesia, la picota y
la fuente-abrevadero, aunque ALANA y Entorno Escorial presentaron alegaciones
para incorporar todos los inmuebles conservados.
Navalquejigo ha sufrido
un deterioro rápido: hace tiempo desapareció el portón de la casa consistorial,
cuyo escudo está actualmente en el ayuntamiento de El Escorial, y aunque en parte
de la iglesia se oficiaba misa hasta los años noventa, tras la desaparición de las
campanas y la pila bautismal ha quedado reducida a los muros exteriores, la
fachada y la cabecera, estando a merced de actos vandálicos y expoliadores. En
1996 el consistorio presentó un plan urbanístico para el poblado, estableciendo
condiciones como la cesión del suelo de la iglesia y otras parcelas, y un bajo nivel
de edificabilidad.
En
mayo de 2019 ALANA y Entorno Escorial dirigieron un escrito al alcalde en el
que expresaron su preocupación por el abandono de la iglesia. Tras una reunión de
ambas asociaciones con la Dirección General de Patrimonio Cultural (DGPC) de la
Comunidad, esta envió a sus técnicos a girar una visita de inspección, y a
continuación dirigió al alcalde de El Escorial un escrito en el que le rogaba
instara a los propietarios a cumplir con su deber de conservación, debiendo
presentar un proyecto de rehabilitación en el plazo máximo de tres meses; pero
en febrero de 2020 la concejala de
urbanismo informó a ALANA y Entorno Escorial que la carta enviada no había
recibido respuesta. Este año las asociaciones han enviado dos escritos más al Ayuntamiento
y, por fin, la concejala de urbanismo ha respondido que no tienen competencias
para sancionar el propietario.
Además
de la dejación de funciones y el desmoronamiento del patrimonio hay otra
amenaza: la especulación urbanística. El plan de 1996 ya no está en vigor, pero
ahora nos enfrentamos a un nuevo proyecto y lo más probable es que sea mucho menos
garantista. De momento los propietarios han
iniciado acciones legales para desalojar a las personas que habitan las
casas herrén desde 1997. Nuestro temor es que en el afán por obtener el máximo
aprovechamiento no se respeten ni los elementos, ni el carácter o la ordenación
original del pueblo.
Las asociaciones firmantes solicitamos a la
Comunidad de Madrid que tome cartas en este asunto: para que se acometan de
manera urgente obras de consolidación de las ruinas de la Iglesia de la Santa
Cruz; para que incoe su declaración junto con todo el poblado medieval como
Bien de Interés Patrimonial; y para que se redacte un plan de rehabilitación
integral del mismo antes de permitir cualquier actividad urbanística.
ALANA, Asociación de Vecinos de Los Arroyos y Navalquejigo; Abantos
Activo; Ecologistas
en Acción Sierras de Madrid; Entorno
Escorial; Madrid Ciudadanía y Patrimonio; Observatorio Ciudadano para la
Conservación del Patrimonio de la Sierra de Guadarrama; Plataforma Ciudadana Escurialense; Sociedad Caminera del Real de
Manzanares.