UNA NUEVA ORDENANZA QUE ES UN GOLPE DIRECTO A LA LIBERTAD CIUDADANA EN EL ESCORIAL

Protesta en El Escorial (2010) que ahora sería ilegal sin permiso del Ayto.

Acción Plural, Entorno Escorial, Equo e Izquierda Unida han puesto alegaciones a la nueva ordenanza municipal reguladora de la ocupación temporal de la vía pública sin finalidad lucrativa del Ayuntamiento de El Escorial (BOCM 69). En opinión de todos los grupos, la ordenanza restringe el ejercicio de derechos fundamentales de expresión, reunión, manifestación y asociación en las vías públicas.     

Desde hace muchos años en San Lorenzo de El Escorial los movimientos sociales tienen vetada la organización de mesas informativas y otros actos públicos aunque las cofradías y hermandades religiosas disfrutan de una libertad total en los espacios públicos sanlorentinos. Con su nueva ordenanza restrictiva parece que el alcalde de El Escorial, Antonio Vicente, quiere seguir la misma política de acotar los movimientos sociales y criminalizar la protesta pacífica espontánea.

La nueva ordenanza pone una serie de trabas para organizar cualquier acto en la vía pública y veta totalmente la protesta espontanea aunque sea pacífica y no estorbe el tráfico rodado o el tránsito de las personas. El texto solo habla de los sujetos solicitantes como de entidades registradas, sin aludir y guardando silencio respecto a los ‘particulares personas físicas’ y a los ‘colectivos no registrados’, que pudieran muy bien pretender legítimamente esos usos cívicos en las calles. Así se podría criminalizar cualquier acto público realizado por grupos no registrados en el municipio como el 15M-Escorial o la Plataforma por los Afectados de las Hipotecas.

La ordenanza establece varios requisitos para dificultar la organización de actos y exige un plazo de diez días de antelación para la ‘comunicación previa’, (verdadera solicitud de autorización). También es inapropiada y excesiva la exigencia de los requisitos que se establecen, tales como la comunicación de los medios materiales o instrumentos que se utilizarán en la actividad pretendida.

Los objetivos de la ordenanza son obvios: controlar a los ciudadanos y restringir sus derechos fundamentales. Ha de señalarse que no existe verdadera necesidad de esta medida, puesto que nunca antes se produjo dificultad alguna como la simultaneidad o coincidencia de actos diversos que no se pueda resolver con una buena actuación de sentido común para el uso los espacios.  

De esta forma el equipo de gobierno del Ayuntamiento de El Escorial, incapaz de dinamizar la economía local y de ayudar a las familias golpeadas por el paro y la crisis rampante, se dedica a reducir la libertad ciudadana. Parece que las únicas soluciones del Señor Vicente a la crisis son de subir las tasas y los impuestos municipales, subir su propio sueldo y los de sus concejales (más información), defender los salarios ilegales de los altos cargos (más información) y tapar cualquier protesta.