COMPRAR PRODUCTOS ESPAÑOLES: ¿UN PRIMER PASO HACIA EL CONSUMO RESPONSABLE?

13 de julio: Ante el derrumbe económico actual, volvemos a escuchar llamadas a comprar productos españoles. Un mensaje que circula ahora en Internet propone mirar el código de barra de los productos (84 es de los productos españoles): "Si te quedas y consumes 84 contribuirás a que la economía española se mueva y por tanto tu puesto de trabajo no peligre tanto como está peligrando en estos momentos y contribuirás a que tus amigos, familiares o a que tantas personas que no conoces que actualmente están en paro e incluso en situación precaria puedar salir adelante con dignidad." Recordamos que, ya hace casi cuatro años, el entonces ministro Sebastián dijo: "Podemos hacer mucho contra la crisis si compramos juguetes españoles, productos hechos en España como textil, calzado, coches o electrodomésticos, sin duda, estaremos creando empleo y riqueza en España." (fuente El País)

Sin embargo, a pesar de la crisis, parece que las grandes superficies o las grandes multinacionales no han hecho nada para fomentar la venta de los productos locales; de hecho su política de máximo beneficio encima de todo implica introducir cada vez más productos de fuera del país, especialmente los de países sin la más mínima garantía de unas condiciones laborales decentes y con ausencia total de regulación sobre los impactos ambientales de los procesos de producción.   

Se puede ver un buen ejemplo de esta globalización creciente en la venta de los alimentos. El mes pasado la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos de Andalucía (UPA) dio a conocer un estudio en el que se recoge el importante crecimiento de productos no españoles, como frutas, hortalizas y productos transformados, cuya presencia es cada vez mayor en los lineales de las grandes superficies. En ocasiones se ha detectado que, bajo el paraguas de productos españoles, se posicionan alimentos importados de terceros países induciendo al consumidor al mayor de los engaños. En cuanto al ranking de países importadores de frutas, hortalizas y transformados a nuestro país, el primer lugar lo ocupa Perú, segundo China, USA y Argentina, sin embargo Marruecos está escalando a pasos agigantados las primeras posiciones como uno de los principales exportadores a España (fuente Radio Granada).

Lo mismo pasa con los productos manufacturados como ropa o zapatos y no es ninguna garantía ser de empresa  española. Inditex se niega rotondamente a  declarar donde fabrican sus productos y el año pasado una investigación del Ministerio de Trabajo de Brasil descubrió talleres de costura clandestinos, donde según fuentes oficiales se empleaba "mano de obra esclava" trabajando de sol a sol para Zara. Las grandes superficies colaboran en esta opacidad y dan escasa información sobre el lugar de producción de los productos en venta. Por ejemplo, hace unos días en la zapatería de El Corte Inglés en Madrid, los vendedores no sabían la procedencia de la mayor parte de sus zapatos y daban información erronea. Dijeron que los zapatos "Snipe" eran fabricados en España, pero una busqueda exhaustiva en su sitio web (Snipe) y en otras páginas no daba ninguna información sobre su  lugar de fabricación. Hay muchísimos datos sobre el uso de Snipe de materiales ecológicos y procesos sin tóxicos pero nada sobre la ubicación de las fábricas que producen los zapatos ni sobre las condiciones de sus trabajadores.

Parece obvio que comprar productos españoles sí pueden ayudar nuestra maltrecha economía pero hay que  advertir que la extrema derecha ya está utilizando este tema para enviar mensajes xenófobos, especialmente en contra de los comercios chinos: "con sus comercios envían españoles al paro" pone un cartel abiertamente racista de la organización neo-nazi, Juventud Nacional. Incluso un web como Yo Consumo Productos Españoles contiene discursos como "El Modelo Parasitario Chino", por el Profesor Julián Pavón, que intenta culpar de la crisis a "los de fuera" en  vez de analizar nuestro modelo y la propia conducta poco escrupulosa de muchas grandes empresas españolas.

Por eso, nuestros mensajes siempre deberían apuntar a los efectos positivos de la compra local y entenderlo como un primer paso hacia un consumo más responsable por asumir que nuestras decisiones de compra sí tienen un impacto sobre el mundo en que vivimos. Tres páginas que pueden ayudar el consumidor responsable son: Konsumo Responsable;  ConsumeHastaMorir; Consumo - Ecologistas en Acción. A nivel local, el grupo de consumo Ecoescorial y Entorno Escorial han redactado un Dosier sobre consumo responsable y ecológico.