De entre ellos sin duda, la actuación
más espectacular y arriesgada es la de los Hidroaviones del 43 Grupo del Ejército
del Aire (más información abajo). Estos días hemos podido verlos
actuar en el incendio de Robledo, y una vez más,
comprobar la valentía de estos pilotos. Para aumentar la eficacia de su descarga, ajustan hasta el máximo su
nivel de vuelo, rozando las copas de los árboles, los tejados de las casas, los
tendidos eléctricos. Todo por bombardear a su enemigo el fuego. Las mismas
imágenes de Robledo nos han mostrado a los hidroaviones entre montañas, bajando con su pesadísima
carga de agua, (Más de 5.000
l.) rozar las
copas de los pinos, abrir las compuertas, soltar y ascender y girar para no colisionar con la
montaña inmediata, y todo esto, uno detrás de otro, después de recargar en Valmayor,
machacando los frentes, ahogándolos en lo posible. Estas bruscas maniobras
provocan importantísimas sacudidas del aparato,
crujiendo toda su estructura. Imaginemos
por un momento unas turbulencias de un vuelo comercial y añadamos que el avión
desciende rápidamente entre el humo del incendio. Hay que ser
valiente obligatoriamente.  |
| Un hidroavión en acción en Robledo (El País: Luis Sevillano) |
Enlaces:
Imágenes tomadas muy de cerca: http://www.youtube.com/watch?v=wLn3JgGTUCc
Video realizado por los propios integrantes del grupo 43. Como sucede
en todos los grupos que se juegan la
vida día a día, cuando pueden se divierten. Contiene imágenes de misiones
reales (En las que no bromean)
Imágenes de salida y regreso de
una misión.
Abajo: más información sobre los hidroaviones del 43 Grupo del Ejército del Aire:
Esta unidad se formó en enero
de 1973 con la única misión de la extinción de incendios y cuando es necesario,
servicios SAR, (Rescate en el mar). Su
existencia esta ligada íntimamente a la de su
avión por excelencia: El Canadair CL215 (Actualmente CL215 T). Este avión se diseñó en Canadá, también con una preocupación
especial por la extinción de los incendios de sus magníficos bosques, y su configuración de
“Hidrocanoa” (El fuselaje hace las veces de embarcación), se debe a la
intención de aprovechar la gran
superficie de los lagos y ríos canadienses. Junto con Canadá, fue el Ejército
del Aire Español uno de los primeros en
operar estos aviones y también de los que (desgraciadamente), más uso le
da. Hasta tal punto nuestros pilotos han
“exprimido” estos hidros, que la actual version CL 215 –T se desarrolla a partir de las peticiones de mejora de
nuestros pilotos, añadiendo refuerzos, elementos aerodinámicos y una motorización más moderna y potente
(Turbohélices) a los viejos modelos actualizándolos . El siguiente modelo 415 es
el mismo avión pero con electrónica digital
Comentario
final del Ejército del Aire sobre esta unidad:
“Hasta la
fecha la unidad ha realizado un total de 133.100 horas de vuelo y ha efectuado
aproximadamente 305.000 cargas de agua.
Para esta
Unidad es un motivo de inmensa satisfacción el conseguir año tras año, Campaña
tras Campaña, el objetivo final de su misión, la extinción del incendio en el
que se esta operando.
La Unidad es asimismo consciente de que ese objetivo
no se lograría sin la cooperación y ayuda del resto de medios destacados en la
lucha contra incendios, tanto militares como civiles, aéreos o terrestres,
nacionales o extranjeros y cuya abnegada y ejemplar labor sería injusto no
recordar y reconocer desde esta página.
Y para
finalizar, recordamos a los quince miembros de esta Unidad que dieron su vida
en el transcurso de su misión, ejemplarizando con su entrega el total
compromiso y férrea voluntad de los miembros del 43 Grupo de cumplir con su
misión.”
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