Ha muerto Adolfo
Ruiz Abascal, pintor, escritor y gran conocedor del medio natural escurialense
y de sus gentes. De sus muchas obras, destaca su precioso libro "Del Entorno Escurialense", editado
por la Sociedad de Fomento y reconstrucción del Coliseo Carlos III, en el que
invita a los lectores "a pasear con el trazo de la plumilla, por los
entrañables rincones, con el sincero deseo de que os hagan tan felices como a
mí". Tuvimos la gran suerte de conocer a Adolfo el verano pasado y comentar
con el su último proyecto: un libro fascinante sobre el agua en nuestra comarca.
Un familiar suyo deja
un testimonio personal sobre Adolfo:
El 11
de febrero nos dejó Adolfo Ruiz Abascal. Pintor,
escritor y contador de historias de ese Pueblo y Monasterio al que tanto amó:
San Lorenzo de El Escorial.
Gurriato de pro, de fuerte carácter y alma
inquieta, donde fuera siempre encontraba las puertas abiertas. De memoria prodigiosa,
le gustaba narrar con todo lujo de detalles, cualquier historieta sucedida en
el pueblo, con nombres y apellidos y hasta apodo de los mentados, también de la
vida de Felipe II, del Monasterio o del entorno natural. Se ha recorrido todos
los archivos relacionados con el Monasterio al igual que todos los rincones
tanto del casco urbano como del entorno natural. Ha dejado un legado escrito en
el cual no deja fuera de él fuente, puente, arroyo, mojón, o cualquier elemento
natural o arquitectónico de interés, así como referencias al costumbrismo
gurriato. También se atrevió a escribir todos los años una “Obrita” de teatro
de temas algo picaros y desenfadados, una de ellas se titulaba “Gurriatos y
Caciques”. Su obra pictórica es muy variada y, tras una larga trayectoria, su
referente ha sido el Monasterio. A este le ha diseccionado hasta sus más
íntimos tejidos. Le ha estudiado, investigado, recorrido e inmortalizado
siempre con la ilusión del primer día.
No hay peñasco, torre, mirador, arroyo, roble,
cantueso, esquina o plaza que no recuerde en su memoria al sentir su presencia.
Todos le echarán de menos. Se ha llevado consigo un gran tesoro y, a su vez,
nos ha dejado un vasto y apasionado legado.
Piedra Berroqueña.
Agua de “Cebadillas”
Aires de Abantos.
La retama, la jara…
Eso eres tú.
Y serás siempre….
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