SI SE SALVÓ EL COLISEO DE CARLOS III, ¿POR QUÉ NO PODEMOS SALVAR EL CINE VARIEDADES?
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Foto: Lorenzo Risco |
El miércoles 22 de abril los alumnos de los cursos de Historia y arte del Real Sitio (San Lorenzo y El Escorial) visitaron el Real Coliseo de Carlos III con su profesor, José Luis Vega Loeches. Aprendimos mucho de este edificio histórico, construido a mediados del siglo XVIII por el arquitecto francés Jaime Marquet y posteriormente reformado por Villanueva. En los años 70 del siglo pasado el teatro, ya convertido en cine, estaba en ruinas y hubo una orden de demolición firmada por el Ayuntamiento. Sin embargo, un movimiento vecinal y del mundo de la cultura montó una campaña que logró salvar el emblemático coliseo. Entre 1975 y 1978, con el proyecto de los arquitectos Mariano Bayón y José Luis Martín, se realizaron unas reformas muy respetuosas con la historia del teatro y la obra recibió el premio Europa Nostra. Durante nuestra visita, los alumnos del grupo de historia local disfrutamos viendo este espacio tan bello, con unos elementos como la lámpara del patio de butacas y las pinturas del techo. Al ver una reforma tan bonita fue lógico pensar en otro emblemático edificio de la cultura en nuestro pueblo: el Cine Variedades. Hace un par de años se fundó la Asociación Cultural Cine Variedades en un intento de salvar el edificio. Sin embargo, el proyecto lleva un año sin levantar cabeza y el Ayuntamiento de San Lorenzo tampoco hace nada para evitar que este histórico cine se derrumbe. Es irónico que, en los últimos años del franquismo, un movimiento de ciudadanos logró la colaboración de las administraciones públicas para salvar el Real Coliseo. Cincuenta años más tarde, la falta de fuerza de la sociedad civil gurriata y la desidia del actual consistorio sanlorentino están condenando a la muerte el Cine Variedades.
Enlaces:
Teatro Real Coliseo de Carlos III (Wikipedia)
Programa del Real Coliseo
Más fotos:
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6 comentarios:
El contenido de este artículo es incorrecto e incompleto.
El Coliseo Carlos III se salvó porque Pedro Martín Gómez lo adquirió y recuperó con su patrimonio y esfuerzo personal.
No solo no tuvo ayuda de nadie sino que incluso la Dirección General de Patrimonio Arquitectónico de entonces autorizó su derribo por decir que en su estado carecía de valor, y el propio Ayuntamiento tenía interés en hacer viviendas en el solar.
Fue entonces cuando el Sr. Martín impulsó, acudiendo a sus contactos personales en el mundo de la cultura y la prensa de Madrid, la visualización pública de la amenaza de desastre y su denuncia, solicitando la paralización de su derribo.
Es más, el equipo de gobierno del ayuntamiento de entonces le declaró por ello (a él y a su hermano, el arquitecto José Martín) persona non grata por denunciar los intereses espúreos subyacentes a ese crimen contra el patrimonio cultural de todos.
Me parece lamentable que Entorno Escorial carezca de rigor en este artículo y se olvide de las pocas personas que a lo largo de los años contribuyen o han contribuido a la conversación del rico patrimonio histórico de nuestro entorno.
Mis noticias son en el mismo sentido que el comentario anterior. Animo a que un mecenas (o colectivo) pueda encabezar la recuperación del Cine Variedades sin olvidarlo anterior.No fue porque sí y una mañana se me ocurrió. Ánimo.
Gracias al lector anónimo por su información sobre el papel de Pedro Martín en la reforma del Coliseo en los años 70. Hablamos en nuestra (corta) entrada de un "movimiento ciudadano" para reformar este edificio sin entrar en los detalles sobre las personalidades detrás de ello. El propósito de la entrada fue contrastar el éxito de esta reforma con el actual estado de ruina del Cine Variedades, no narrar los acontecimientos de la operación de conservación. Por eso, es un poco injusto decir que nuestro artículo "carezca de rigor" y que sea "incorrecto". De todas formas, invitamos a la persona anónima a enviarnos un artículo sobre los papeles de Pedro Martín y su hermano en la reforma del teatro, que en ningún momento pretendemos menoscabar.
Injusto es dar información errónea de base sin contrastar. Les informo:
En aquél momento TANTO LAS ADMINISTRACIONES (local y nacional, incluido Bellas Artes) querían/autorizaban el derribo.
La SOCIEDAD CIVIL que ustedes mencionan era la de fuera del pueblo (de Madrid y resto de España), porque la del pueblo (con el alcalde a la cabeza) estaban a favor del derribo y la construcción de viviendas.
Y un particular (Sr. Martín) fue el que tuvo que endeudarse personalmente para adquirirlo y restaurarlo a través de la Sociedad de Fomento y Reconstrucción del Real Coliseo.
De nuevo lamento su cerril empecinamiento en el error de los datos y su valoración. Comienzo a pensar que hay intencionalidad.
Y no es una opinión, existe abundante bibliografía sobre todo este proceso.
Saludos
Repetimos, si usted quiere publicar algo sobre el proceso de reforma del Coliseo y el papel del señor Martín, envienos un artículo y lo pondremos en el blog. Sería más positivo y útil para todos que colgar comentarios airados desde el anonimato.
Mire usted "Sr. Entorno", a mi el Sr. Martín me importa poco. Lo que trato es de INFORMARLES de HECHOS para que las valoraciones que USTEDES SI INCORPORAN en su artículo sean correctas.
Lamento profundamente haberles ofendido, pero entiendo que ustedes publican para informar ¿o es para insinuar?.
El artículo que usted me reclama, y como ya le he dicho anteriormente, ya está escrito (hay varios libros).
Mi interés es simplemente INFORMAR a sus lectores que el Teatro se salvo por un particular, no por las administraciones públicas ni lo que usted llama sociedad civil local que querían todo lo contrario.
Le deseo mucha felicidad y prosperidad, ..., desde el anonimato (como usted).
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